A Martita:
Con mucha tristeza le pregunté a Dios ¿por qué?
Si su vida fue un constante esfuerzo , si tenía mucho tiempo por delante , muchas cosas por disfrutar.
Le pregunté ¿Por qué las personas buenas mueren?
Sentí una repentina tristeza al pensar que nunca más seríamos iguales, que aquel lunes comenzaríamos una nueva página de este libro que nos ofreció la vida ,estamos en una tormenta donde no debemos permitirnos naufragar...haremos honor a nuestras ganas de vivir y, por los que estamos aquí, no bajemos la guardia aunque yo le siga preguntando a Dios ¿POR QUÉ? y él se quede callado ,quizás respetando este dolor que duele y dolerá hoy y más allá.
Hermoso
ResponderBorrarAveces es bueno plasmar en un escrito lo que sentimos , pareciera que alivia la angustia.
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